La pareja ha protagonizado una discusión por la salsa de tomate de los espaguetis.
‘Gran Hermano DÚO’ lleva más de dos meses en emisión y la única pareja que ha vivido junta todo lo que llevamos de concurso es la formada por Kiko Rivera e Irene Rosales. Los dos han estado muy unidos durante toda la edición, pero también han protagonizado alguna que otra discusión, la última, por la salsa de tomate que le iban a echar a los espaguetis.
Todo empezó cuando en el jardín Irene afirmó que no le gusta como el cantante hace la salsa, ya que fríe poco el tomate, así como la cebolla y el ajo de la salsa. Unas palabras que no sentaron nada bien a Rivera y decidió desvincularse de preparar la comida esa noche, dejando claro que a partir de ahora sería su mujer la que se encargara de hacer la salsa de tomate. Más tarde, ya en la cocina, arrancó la gran discusión: Yo no me he enfadado porque la que me ha enseñado a hacer las lentejas eres tú, con los cojones que tú tienes. Que no solo a ti te molestan las cosas, a mí también, ¿o no tengo derecho? Te has puesto a gritarme…”, le recriminó Kiko a su pareja.
“Me has dicho que no lo hago bien, han sido tus palabras”, añadía de forma alterada Rivera. Por su parte, Rosales aseguraba que lo que le quería decir es que simplemente no le gustaba la forma en la que el hijo de la tonadillera hacía la salsa. “Eso no has dicho, me vas a dejar a mí como un loco“, contestaba el DJ.
“No me pongas esa sonrisa porque te estoy hablando bien. Joder, Irene, ¿eh? No te pongas así que cojo y me voy ahora mismo y te quedas aquí. No me toques los cojones, no te rías, que me voy”, asegurada Rivera, visiblemente molesto. Irene, que no daba crédito a la situación, le repitió que no le había dado una contestación con un mal tono y que simplemente quería dejarle claro que no le gusta “comer los espaguetis con salsa de tomate que lleve cebolla y ajo”.