‘Supervivientes’ adelanta por sorpresa la unificación definitiva y Artùr y Jaime se unirán al resto de concursantes en la próxima gala.
‘Supervivientes 2023‘ adelanta por sorpresa la unificación definitiva. Habitualmente, los concursantes desterrados se unen al grupo en plena recta final, cuando el reality está a punto de acabar. Sin embargo, en esta ocasión será durante la gala del jueves 4 de mayo, más de un mes antes de que acabe la edición, por lo que los concursantes pasarán a convivir en un único grupo y en una única playa.
Artùr y Jaime Nava llevan prácticamente todo el concurso solos. Tras sus tempranas expulsiones del reality, ambos concursantes fueron desterrados a la playa de los Olvidados, dónde han estado conviviendo hasta el día de hoy. Sus ganas por seguir concursando y su gran esfuerzo en la supervivencia enamoraron a un público que los ha ido salvando semana tras semana.
Ambos concursantes son ya inseparables. «No me imagino seguir en este concurso sin ti», le confesaba Jaime. Y es que esta complicidad también les ha llevado a saltarse las normas del concurso. Durante la estancia de Katerina, los tres concursantes pactaron robar en la casa de vigilancia de playa de los Olvidados: galletas, pan de molde e incluso aceite. «Esto es muy serio. La organización ha tomado nota y habrá consecuencias por el robo», advertía el presentador de ‘Conexión Honduras‘. Jaime terminó admitiendo la complicidad en el robo: «Esto es un verdadero infierno. Sé que robar no está bien, yo no he robado en mi vida pero en estas condiciones…».
Por otro lado, los dos concursantes no han estado del todo al margen de lo que ocurría entre el resto de sus compañeros. Durante el pasado ‘Conexión Honduras’ Ion les mostró todo lo que había ocurrido con Yaiza. «Lamentable», calificaba Jaime Nava. «Pensábamos que había sido la bronca con Yaiza, ya nos había contado Raquel, Arelys lo mismo… ya habíamos pensado que ella estaba provocando algo», apuntaba Artur. «Me ha sorprendido que Asraf preguntara a los testigos que dijeran la verdad y que nadie le dijera nada. Si realmente estaban presentes durante esas reiteradas faltas de respeto…», remataba Jaime.
