El concursante ha conseguido desquiciar al resto de la casa.
La séptima edición de ‘Gran Hermano VIP’ ya está en marcha y en tan solo cinco días de convivencia ya hay un claro protagonista en Guadalix de la Sierra: Hugo Castejón. Tanto fuera como dentro de la casa son muchos los que comparan su concurso con el de Miriam Saavedra, que consiguió alzarse como ganadora de la anterior edición, pero la verdad es que el «cantante» poco tiene que ver con la reina inca.
Hugo Castejón tiene actualmente a casi toda la casa en su contra, como Miriam el año pasado, pero en aquella ocasión no fue la joven la que provocó una separación en dos bandos. La peruana entró tres días más tarde a la casa y en su llegada Mónica Hoyos, su gran enemiga, se encargó de poner al resto de concursantes en su contra. Ella no había hecho absolutamente nada, entró y se encontró sola y con todos los participantes mirándola mal. En el caso de Hugo, ha sido él el encargado de forzar las discusiones, buscando a los personajes que sabe que más van a dar que hablar, como Mila Ximénez, que es una bomba que explota rápidamente.
Si es verdad que en el caso de que Hugo consiga salvarse este jueves de la primera nominación, se proclamará como uno de los favoritos y poco a poco la edición se irá pareciendo cada vez más a ‘GH VIP 6’ o ‘GH DÚO’ con María Jesús Ruíz. Pero en esta ocasión, no ha sido de forma natural, sino forzada por una persona que no tiene nada que perder y está dispuesto a todo por quedarse una semana más en Guadalix de la Sierra.
Asimismo, muchos espectadores también aseguran que Hugo es el único protagonista y si saliese expulsado el jueves Guadalix de la Sierra sería la «casa de la pradera». Simplemente hay que mirar al pasado para desmentir estas especulaciones, ya que en ‘GH VIP 3’ una de las protagonistas fue Olvido y una vez fuera, la casa se volvió a dividir en dos bandos y se crearon tramas a la altura de un formato de telerrealidad. Y lo mismo pasó en ‘GH 16’ con Maite Galdeano o en ‘GH VIP 5’ con Toño Sanchís. En un reality nadie es imprescindible, todos los concursantes tienen potencial y cuando uno fuerte desaparece, otro adquiere el papel de protagonista.
