Hablamos con el director de TV3 justo después de unas elecciones que cambiarán la dirección de la cadena autonómica.
Después de los comicios en Catalunya el pasado 14 de febrero y la inminente constitución de un nuevo Govern, Vicent Sanchis empieza a despedirse de su cargo. Repasamos con él sus cuatro años al frente de TV3 y valora la situación en la que dejará la cadena en los próximos meses.
En marzo de 2017 entraste como director de TV3 y te ha tocado vivir cuatro años muy convulsos en tu silla. Supongo que debe quemar un poco…
Sí, es uno de los cargos complicados de este país. No sé que silla quema más, si la del director de TV3 o la de la consellera de salud. No es un sitio fácil, para que te hagas una idea poco después de aceptar el cargo sucedieron los atentados de La Rambla, después todo el procés, después el referéndum, después la represión del referéndum, después mi procesamiento, después la pandemia, después elecciones sin parar… Realmente he estado distraído (ríe). Mi ventaja es que ya sabía a lo que me enfrentaba. Yo acepté el cargo en un momento complicadísimo y la realidad no me ha decepcionado (ríe). Han sido años muy intensos, yo pensaba que iba a ser un poco más corto. Se ha alargado un poco (ríe). La situación extraordinaria que motivaba mi interés en seguir en mi cargo ha seguido siendo extraordinaria muuuucho tiempo. Me esperaba que fuese todo mucho más corto y rápido.
Si se hiciese una serie de televisión sobre tu paso por la dirección de TV3, ¿de qué género sería?
(ríe) Una comedia de terror. Esas películas de miedo que intentan ser divertidas.
Ahora viene un posible cambio de gobierno y la Ley de la CCMA prevé un cambio de consejo y de direcciones. ¿Cuál es tu futuro?
Yo que sé, no tengo una bola de cristal. Lo que está claro es que efectivamente al Consell de Govern hace dos años que se le acabó el tiempo adjudicado por ley. Supongo que si hay gobierno y el Parlament se consolida, se supone que las decisiones que tomarán con cierta urgencia serán renovar todas esas entidades e instituciones que ya llevan demasiado tiempo de más. El relevo de los consellers de la corporación llevará a la convocatoria del concurso público para la elección de nuevos directores de Catalunya Ràdio y TV3.
¿Te volverás a presentar?
No. No lo tengo en mente. (ríe) Creo que no, al final no sé que puede pasar, pero de entrada no.
¿En estos cuatro años has recibido muchas presiones?
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Claro que he recibido muchas presiones. Han habido muchas y la gente sabe que he tenido que aceptar aquellas que se hacían con razón. Cuando alguien te llama y te dice que no lo estás haciendo bien, de manera constructiva, es una presión razonable y lógica. Esas presiones las acepto porque son normales. Una presión de una persona con otro tipo de interés, de carácter más político o social, que le favorezca solo a ella, pues no la acepto. Yo no he aceptado nunca, nunca, una presión así. A mucha gente no le gusta pero estoy muy contento de irme de aquí con mucha gente enfadada. Eso es una buena noticia. Creo que dejo la tele un poco mejor de cómo me la encontré.
La situación económica de la Corporación, sumada a los bajos ingresos publicitarios durante la pandemia, ha resultado muy delicada. ¿Será complicado tirar adelante la parrilla de TV3 durante los próximos trimestres?
Ya es complicado. Si no cambian las condiciones de aquí a poco no habrá parrilla.
Es un poco como ‘El día de la Marmota’…
Sí. Nosotros solo tenemos dos fuentes de ingresos y ambas han bajado. Han aumentado los sueldos de los trabajadores públicos, debemos devolver pagas que se eliminaron durante los recortes, hay sorpresas con el IVA… en definitiva, si aumentan los gastos y disminuyen los ingresos explícame como podemos llegar vivos a final de año…
En verano peligraba la continuidad de programas como ‘Polònia’ y la serie diaria ‘Com Si Fos Ahir’…
Vuelven a estar en peligro. ¡Y tanto! Peligra una parte importante de la parrilla. Estamos con presupuestos prorrogados y las previsiones de ingresos no se han cumplido. Comparado con el 2019, este año tendremos nueve millones menos de ingresos.
¿Cuándo notará el espectador esta crisis económica interna?
Estamos trabajando para que el espectador no lo note, pero nosotros la notamos cada día.
A principios de temporada se anunció una gran apuesta digital. ¿Cómo la valora?
Casi todo lo que producimos fue a raíz de la convocatoria de seis millones de euros del Departamento de Cultura. Se han podido hacer cosas que han funcionado muy bien pero siempre digo lo mismo: los contenidos digitales son necesarios pero no dan ingresos publicitarios. Por tanto, todo lo digital es más gasto y, o haces menos programas de televisión convencional o tienes unos ingresos publicitarios que al menos den consistencia a la maniobra. Si la publicidad en internet no funciona y nosotros no podemos reducir la programación convencional… Tiramos el terreno digital adelante tan bien como podemos. Son apuestas urgentes, todo el modelo de televisión debería cambiar, pero tenemos problemas financieros para hacerlo.
La última encuesta de usos lingüísticos de la Dirección General de Política Lingüística de la Generalitat de Catalunya revela que entre los más jóvenes, el uso habitual del catalán ha caído hasta el 19’6%. ¿Qué debe hacer TV3 para frenar este descenso del uso del catalán entre los jóvenes?
Contenidos, contenidos, contenidos. Presencia, presencia, presencia. Nosotros no podemos hacer otra cosa. Tenemos que hacer programas y multiplicar los ámbitos por donde los emitimos. Evidentemente tenemos que estar en redes sociales, llegar a acuerdos con plataformas de pago y mantener la televisión convencional en paralelo. Tenemos que atacar por toooodos los medios por los que se informa y entretiene la juventud de la actualidad, y eso quiere decir un cambio de nuestro modelo. Por tanto, el cambio de modelo que deberá hacer el próximo Govern es obligado, de pura supervivencia. Por el contrario, los jóvenes cada vez hablarán más castellano… Eso sí, atención, nosotros no cambiaremos esto. Las nuevas tecnologías han multiplicado los contenidos por mil, pero estos contenidos se consumen mayoritariamente en castellano e inglés. TV3 no puede revertir esta situación sola. La reflexión debe ser más profunda y se tiene que añadir a más elementos y administraciones del gobierno.
En una entrevista que le hicieron a finales de verano anunció que estaban trabajando en un nuevo canal juvenil. En qué estado está esta propuesta?
Parada. Teóricamente lo haremos, pero hace falta dinero. Empezaremos conversaciones con el gobierno, pero si ya no tenemos dinero para hacer los contenidos habituales, que no tenemos ni para intentar salvar el prime time de este año, ¿cómo podemos pensar también en crear contenidos juveniles? Donde no hay, no hay.
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¿Me puede desvelar en qué consistía?
Sí, nuestra propuesta era juntar de nuevo Esport 3 y 33 y dejar un canal solo para la programación infantil que hacemos ahora, añadiendo un horario de contenidos juveniles a partir de las 22.00h. El problema es que, sí, ya tenemos algunas cosas juveniles, pero no suficientes como para asegurar una parrilla diaria con contenidos nuevos que valgan la pena. Todo se ha ralentizado.
¿Y cuándo prevé que se pueda poner en marcha?
Dependerá de cuando tengamos los recursos suficientes para hacerlo. En cuanto los tengamos empezaremos.
TV3 ha demostrado ser una gran impulsora de la ficción en catalán. ¿Cuáles son las siguientes producciones en las que estáis trabajando?
Ahora hay una serie que está a punto de estar acabada que es ‘Àlex’. Hay una serie que ha cambiado de nombre, inicialmente se llamaba ‘Karaoke’, que está en proceso de producción. También está en producción una serie que ganó la convocatoria del Departamento de Cultura, que ahora no recuerdo su nombre. Además, también estamos trabajando en co-producciones y compras con IB3 y la televisión valenciana.
Hablemos de esto. Se cumplen diez años del fin de las emisiones de TV3 en el País Valencià. ¿Cuándo se unirán À punt, TV3 e IB3 para potenciar la producción en catalán?
Ya existe esa unión, lo que no hay es la posibilidad de que TV3 se vea en el País Valencià y À punt en Catalunya. Este intercambio de canales se tiene que hacer por unas frecuencias que son propiedad de la administración. La Generalitat de Catalunya tiene buena disposición pero la valenciana siempre dice que necesita un multiplex más que se lo tiene que otorgar el gobierno. Yo pensaba que como la Generalitat Valenciana y el Gobierno tenían el mismo color, sería una gestión más sencilla, pero se está atrasando. Es escandaloso… Más allá de esto, deberíamos intentar que, dentro de la anormalidad que permite que el Tribunal Supremo le diga a la Generalitat Valenciana que se tiene que comunicar con la Generalitat de Catalunya en castellano, más allá de esta burla a la inteligencia y a la realidad y a todo, más allá de eso, tenemos que trabajar juntos porque es absolutamente indispensable que el mercado catalán esté mucho más ligado y conectado. ¿Cómo puede ser que À punt y TV3 hayamos hecho dos doblajes de una misma serie? Hace falta más comunicación… ¡Nos estamos jugando la supervivencia con esto pero la gente no lo entiende! Seguimos trabajando pero atendiendo a las limitaciones legales, políticas y administrativas. Ante esto solo queda una medicina, la insistencia.
Últimamente una tendencia que está al alza es la recuperación de formatos del pasado. ¿Cree que TV3 debe apostar por la nostalgia?
TV3 siempre recupera formatos del pasado. Lo hacemos a partir de programas específicos que repasan los mejores fragmentos de estos. En cuanto ha emitir programas que ya se han estrenado en prime time, ya sabes que no suele funcionar…
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No me cansaré de pedirle la tercera temporada de ‘Polseres Vermelles’…
(Ríe) Bueno… las series que coproducimos dependen de la productora. Pasó lo mismo con ‘Merlí’. Su guionista decidió matarlo y no pudimos hacer nada. Piensa que producir un spin off con Movistar daba a la productora tres veces más de presupuesto por capítulo… hay cosas que no están en nuestra mano.
Hablemos de entretenimiento. El miércoles se estrenó ‘Nexes’ con un buen 16,7% de share. ¿Cómo lo valora?
Era muy arriesgado. Es una propuesta muy ambiciosa. Es difícil que hagamos propuestas a lo grande, eso solo se lo pueden permitir las privadas españolas. Además, los dos presentadores son de los periodistas más importantes del país. Puede ser que hayamos generado demasiadas expectativas… Yo creo que el programa es muy bueno, y que después del primer pase se irá trabajando para que el resultado final sea un buen retrato de la sociedad. Espero que el buen resultado del primer capítulo se pueda seguir viendo en los siguientes.
¿Cree que hacen falta cambios o que el programa ya está al 100%?
¡No hombre no! No podemos estar nunca contentos con el resultado. Ni con ‘Nexes’ ni con nada. Nosotros cobramos por mejorar cada día. Revisar pequeños detalles siempre es algo obligatorio. Lo haremos. Hay cosas que funcionan mejor y otras peor…
¿Algún formato nuevo que estén preproduciendo…?
Ahora mismo trabajamos en pocas cosas. No tenemos asegurada la programación habitual, volvemos a estar en una situación de peligro para los programas de siempre, desde el ‘Polònia’ hasta el ‘FAQS’. Es por eso que no estamos trabajando en demasiados programas nuevos. Confiamos en que vuelva a haber otra convocatoria para estrenar programas nuevos en el último trimestre del año.
Hace unas semanas se supo que se disolvía el área de Nuevos Formatos, liderada por Miquel Garcia. ¿Por qué se tomó esta decisión?
Se consideró que ‘Nuevos Formatos’ son todos y que los encargados de programas necesitaban simplificar su estructura. Se ha cambiado la estructura. ‘Nuevos formatos’ sigue existiendo como concepto en un área delimitada, pero el laboratorio de nuevos formatos donde trabajaba Miquel Garcia sigue funcionando. Ha sido un cambio de caras, ya no tenemos directores de canales, tenemos directores de contenidos. Un cambio estructural interno que se canaliza o bien en el departamento digital o en el de la televisión convencional.
También se ha recuperado el Departamento de Culturales. El comité de empresa de TV3 se preguntaba qué capacidad de producción interna tendrá este departamento. ¿Usted la sabe?
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Nuestra capacidad de producción ya la hablamos con el comité de empresa: estamos saturados. Producimos mucho internamente, tenemos una situación del 98% y los programas culturales entran dentro de una de las ramas más importantes de esta casa… Haremos lo que podamos cuando podamos. Pero queremos ayudar al sector cultural, esa es nuestra prioridad.
Cambiemos totalmente de tema. Hace unos días Rosa María Mateo, administradora única provisional de RTVE, cesó dos trabajadores por un letrero sobre la Princesa Leonor y el rey emérito huido. Si este letrero se hubiera emitido en TV3, ¿hubiera actuado igual?
No.
¿Le parece desproporcionado?
No entraré a juzgar las decisiones que toman colegas, pero te diré que me parece absolutamente desproporcionado (ríe). ¿Cómo quieres pase esto en TV3? Entre otras cosas, cuando contratas a alguien para que haga chyrons con cierto sentido del humor, ya sabes con lo que estás jugando ¿no? Aquello no creo que fuera tan terrible, pero si tanta gente piensa que es tan transcendente, pues vale, de acuerdo, ya lo miraremos… Pero aquí, que en ‘FAQS’ o ‘Planta Baixa’ aparecen chyrons con un toque irónico… Además que (el rótulo de Leonor) es de una ironía finísima, ¡eh! Digna de ‘La Codorniz’. No decía ninguna mentira…
¿Qué es lo mejor y lo peor que ha hecho en su cargo?
Lo mejor que he hecho ha sido resistir (ríe). En una situación normal sería lo peor, pero he aprovechado al máximo toda la potencia y el talento que tiene esta casa para producir contenidos. Lo peor… uf… pues yo que se, hijo mío… me obligas a hacer un ejercicio de masoquismo y autocrítica… supongo que no he innovado lo suficiente. No he adecuado el modelo de televisión de 1983 a la actualidad, no lo estamos haciendo bien, pero eso ya no depende de mí…
Algunos pensarán que lo peor ha sido no hablar lo suficiente con Pilar Rahola…
Bueno, para algunos será un defecto, para otros una virtud… Ya sabes que Pilar Rahola tiene otros interlocutores que parecen ser muy válidos…
Complete la frase: «Antes de acabar mi mandato debo conseguir…»
No cansarme.
¿Algo que la gente presuponga de su cargo y que no sea cierto?
(Ríe) Que mando. No lo hago, es más apariencia que realidad… La CCMA es una empresa con un consejo de gobierno que me atribuye únicamente la responsabilidad de coordinar contenidos. Nada más. Las cosas esenciales las deciden otros.
