La actriz Interpreta a Carmen, una ejecutiva de fuerte personalidad sobrepasada por la enfermedad de su hija adolescente.
Mujer de éxito en el ámbito profesional y con problemas en su mundo familiar y personal: así es Carmen Irujo, el personaje que interpreta la actriz Mónica Cruz en ‘Madres’, nueva serie de Telecinco que aborda las historias vitales, las relaciones y los conflictos de un grupo de madres que atraviesan una etapa vital con un nexo común: sus hijos están enfermos y reciben tratamiento en el mismo hospital.
Ha dedicado mucho esfuerzo a su carrera y poco tiempo a su vida familiar, circunstancia que le está pasando factura en un momento muy delicado: la enfermedad de su hija adolescente. Carmen Irujo, el personaje que interpreta Mónica Cruz, es una alta ejecutiva que ha tapado sus carencias como madre consintiendo todos los caprichos a su hija Duna, una joven inestable y malcriada. Carmen vive rodeada de gente, pero se encuentra muy sola y su agresividad aleja a quienes podrían ayudarla. Acostumbrada a lidiar con egos tan fuertes como el suyo, no duda en echar la culpa de cualquier problema a los demás. Pero el problema de Duna… ese problema no tiene un culpable.
Esta nueva ficción, que la cadena produce en colaboración con Alea Media y que actualmente graba su primera temporada, está protagonizada por Belén Rueda, Aída Folch, Rosario Pardo, Carmen Ruiz y Carla Díaz. Completan el elenco Alain Hernández, Antonio Molero, Joel Bosqued, Vicky Luengo, Nacho Fresneda, Eva Ugarte, Rocío Muñoz, Xavi Mira, Ana Labordeta, Alfonso Torregrosa, Patxi Freytez, Alberto Velasco, Ana Rayo, Ayoub El Hilali y Marc Clotet.
Así es ‘Madres’
‘Madres’ narra el día a día de un hospital materno-infantil a través de la mirada de pacientes, familiares y médicos que conviven en el área de Pediatría y Maternidad. Es allí donde ellas convergen: mujeres que cruzaron junto a sus hijos la puerta del hospital y dejaron de ser abogadas, periodistas o cajeras para convertirse en madres. Solo madres. Juntas en esta burbuja, deberán afrontar la incertidumbre de un diagnóstico, la complicada relación con el personal médico o las consecuencias del inexorable paso del tiempo que fuera, en el mundo exterior, avanza sin compasión arrastrando con él trabajos, parejas y amistades.
